Manifiesto por la Solidaridad

viernes, 30 de enero de 2009


Hoy es el día en el que decenas de bloggueros hemos decidido unir nuestras fuerzas y todo nuestro potencial por una causa común y solidaria. Ayúdanos a que las decenas se conviertan en centenas, y las centenas en millares compartiendo y difundiendo este mensaje humanitario, para que llegue allá donde la injusticia impera, donde los oídos no quieren escuchar nuestra voz unida, para que se enteren de que existimos, resistimos, y no estamos de acuerdo con lo que están haciendo por resolver los verdaderos problemas de la Humanidad.
Porque es lo que sabemos hacer, publícalo, difúndelo y participa de verdad en este proyecto global que parte de la genial mente del amigo Cornelivs.
Hazlo tuyo también.




MANIFIESTO POR LA SOLIDARIDAD

QUIENES SOMOS:
Los que suscribimos este manifiesto somos ciudadanos en el pleno uso de nuestros derechos civiles, y titulares de la soberanía popular, de la cual emanan los poderes del Estado.

Los firmantes nos dirigimos a todos los ciudadanos del mundo, conocedores de la situación de pobreza, hambre y enfermedad en la que se encuentra gran parte de la población humana en un momento histórico, como el actual, en el que se disponen de los suficientes medios políticos, económicos y científicos que pudieran solucionar estos problemas.

Este manifiesto tiene vocación de universalidad, y va dirigido a toda la humanidad, a cada ser humano que habita el planeta, para que tome conciencia de la terrible situación a la que se enfrentan millones de personas y de alguna manera actúe en consecuencia para terminar con esta insostenible situación. Por ello la versión original en español será traducida a diversas lenguas, pues nuestro propósito consiste en hacer oír la voz de la opinión pública en los lugares en las que se toman las decisiones políticas y económicas del mundo.

A QUIÉN NOS DIRIGIMOS:
Nos dirigimos a la clase política gobernante de nuestros países; así como a los más altos mandatarios de las Organizaciones Internacionales, tales como la Organización de las Naciones Unidas, y a los Presidentes y Gobiernos de los países más poderosos económicamente de la Tierra.

LES MANIFESTAMOS:
1.- Que este texto tiene su origen en la constatación de la extrema situación de necesidad y de hambre que sufre una gran parte de la población de la Tierra y en el desigual e injusto reparto de bienes que existe actualmente en el mundo. Entendemos que la ecuanimidad y la armonía en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana, por lo cual es inadmisible que una gran parte de la población mundial tenga que enfrentarse a una realidad tan precaria, a tal grado de injusticia y desigualdad, a tanta hambre, pobreza y desnutrición.

2.- Que consideramos que dicha situación es intrínsecamente perversa y no admisible ni moral ni éticamente, dado que todos los seres humanos nacen libres e iguales. Igualmente, tenemos presente que todos los ciudadanos del mundo tienen esos derechos desde el mismo instante de su nacimiento y no como una promesa futura cuya conquista dependa de la realidad política, social o económica de sus países.

3.- Que defendemos que es completamente injusto, inmoral y un crimen humanitario punible ante los tribunales internacionales y la Historia que, en pleno Siglo XXI, existan seres humanos que pasen hambre en el mundo, y que mueran por ello. Que es un agravante de ese crimen que, existiendo las leyes internacionales suficientes, así como los medios técnicos, económicos y científicos para corregir dicha situación, los que ejercen el poder en el mundo no lleven a cabo las acciones necesarias para solucionar lo que generaciones futuras calificarán de verdadero genocidio en el que serán culpables todos aquellos que, teniendo los medios para solucionar el problema, no los hayan empleado.

4.- Que consideramos que esta injusta situación es contraria al Derecho Natural, a los Derechos Humanos y a las normas de la más elemental ética, y entendemos que ha llegado el momento de que la voz de la opinión pública exija de sus gobernantes el final de tal estado de cosas.

5.- Que el presente manifiesto no es un manifiesto utópico; y que tampoco es un manifiesto político, ni se pretende con el mismo la instauración de un nuevo orden político o socio-económico mundial, ni ningún menoscabo del tejido empresarial, sanitario y social del mundo desarrollado, sino la más elemental justicia con los desfavorecidos.

POR TODO ELLO, EXIGIMOS A NUESTROS GOBERNANTES:
1.- La adopción de medidas inmediatas y urgentes para paliar tal situación de hambre, enfermedad y desnutrición en el tercer mundo. Consideramos que tales medidas no constituyen una utopía, sino que son perfectamente viables y posibles.

2.- Mantener el compromiso de cumplir los Objetivos del Milenio que, establecidos por Naciones Unidas en el año 2000, definen los principios a los que ha de ajustarse la actuación de los países y del sistema económico internacional para superar, con el horizonte fijado en 2015, las injusticias que aquejan a la humanidad.

3.- La realización de acciones solidarias sistemáticas con los países más desfavorecidos y que se establezca un orden lógico y humano de prioridades en la política económica, con proyectos inteligentes que creen riqueza y puestos de trabajo en los países afectados, facilitando un desarrollo sostenible y un progreso que les ayude a la consolidación de una red sanitaria, económica y social estable que haga posible el retorno a una situación de partida igualitaria.

4.- Que se tomen las medidas necesarias para que los países ricos destinen una parte de sus presupuestos a la creación de riqueza, de empresas y de fuentes de trabajo en los países afectados; así como la adopción de un acuerdo internacional, que debería subscribirse en la ONU de obligado cumplimiento para los países desarrollados.

5.- La implantación de un código ético que regule la estrategia de las empresas multinacionales, así como la eliminación de los paraísos fiscales y la aplicación de la tasa Tobin, ú otra similar, a las transacciones comerciales internacionales, que permita crear un fondo de solidaridad gestionado por Naciones Unidas.

6.- No aceptaremos simples declaraciones de principios que no se traduzcan en políticas concretas. En definitiva, APELAMOS al sentido de la generosidad y humanidad de todos, y fundamentalmente de la clase política internacional económicamente poderosa.

Desde la tierra que espera y cree firmemente en la Solidaridad que construya un mundo mejor y más justo, a 30 de enero de 2009


"MANIFESTE POUR LA SOLIDARITÉQUI SOMMES-NOUS:

Les adhérents à ce manifeste sommes des citoyens en plein usage de nos droits civils et titulaires de la souveraineté populaire, de laquelle émanent les pouvoirs de l'État.

Les signataires nous nous adressons à tous les citoyens du monde, informés de la situation de pauvreté, de famine et de maladie dans laquelle se trouve une grande partie de la population humaine dans un moment historique, comme l'actuel, où l'on dispose des moyens suffisants tant dans les domaines politiques, économiques et scientifiques qui pourraient résoudre ces problèmes.

Ce manifeste a une vocation d'universalité et s'adresse à l'humanité entière, à chaque être humain qui habite cette planète afin qu'il prenne conscience de la terrible situation à laquelle sont confrontés des millions de personnes et d'une certaine façon agisse en conséquence pour mettre fin à cette situation. Pour ce faire la version originale en espagnol sera traduite en diverses langues, car notre intention est de faire entendre la voix de l'opinion publique jusqu'aux lieux où se prennent les décisions politiques et économiques concernant le monde.

Á QUI NOUS NOUS ADRESSONS:

Nous nous adressons à la classe politique gouvernante de nos pays, ainsi qu'aux plus hauts mandataires Des Organisations Internationales, telles que l'Organisation des Nations Unies, et aux Présidents et Gouvernements des pays les plus puissants, économiquement parlant, de la Terre.

NOUS LEUR MANIFESTONS :

1.- Que ce texte émane de la constatation de la situation extrême de besoin et de famine que souffre une grande partie de la population de la Terre et de l'injuste distribution des biens existants aujourd'hui dans le monde. Nous entendons que l'impartialité et l'harmonie dans le monde ont pour base la reconnaissance de la dignité intrinsèque et des droits égaux et inaliénables de tous les membres de la famille humaine, raison pour laquelle il est inadmissible qu'une grande partie de la population mondiale doive affronter une réalité si précaire, à un degré tel d'injustice et d'inégalité, à tant de famine, de pauvreté et de dénutrition.

2.- Que nous considérons que dite situation est de façon inhérente perverse et inadmissible ni moralement ni éthiquement, étant donné que tous les êtres humains naissent libres et égaux .De la même manière, nous n'oublions pas que tous les citoyens du monde ont ces droits dès leur naissance et non comme une promesse future dont la conquête dépend de la réalité politique, sociale et économique de leurs pays.

3.-Que nous défendons qu'il est absolument injuste, immoral et un crime humanitaire punissable devant les tribunaux internationaux et l'Histoire que, en plein XXI ème Siècle, existent des êtres humains qui souffrent de faim dans le monde et qui en meurent. Que c'est une circonstance aggravante de ce crime qu'existant les lois internationales suffisantes, ainsi que les moyens techniques, économiques et scientifiques pour corriger cette situation, ceux qui exercent le pouvoir dans le monde ne réalisent les actions nécessaires pour résoudre ce que les futures générations qualifieront d'authentique génocide dont seront coupables tous ceux qui tout en ayant les moyens pour résoudre ce problème ne les auront pas utilisés.

4.- Que nous considérons que cette situation injuste est contraire au Droit Naturel, aux Droits Humains et aux règles de l'éthique la plus élémentaire et nous pensons que le moment est venu que la voix de l'opinion publique exige de ses dirigeants la fin d'un tel état des choses.

5.- Que ce présent manifeste n'est pas un manifeste utopique; ni un manifeste politique, ni nous prétendons avec ceci l'instauration d'un nouvel ordre politique ou socio-économique mondial, ni aucun discrédit des réseaux entreprise, sanitaire et social du monde développé, sinon la justice la plus élémentaire envers les plus démunis.

POUR TOUTES CES RAISONS , NOUS EXIGEONS DE NOS DIRIGEANTS:
1.- L'adoption de mesures immédiates et urgentes pour mettre fin à la situation de famine, de maladie et dénutrition dans le Tiers-Monde. Nous considérons que de telles mesures ne constituent pas une utopie, sinon qu'elles sont parfaitement viables et possibles.

2.- Maintenir le compromis de remplir les Objectifs du Millénaire qui, établis par les Nations Unies en 2000, définissent les principes sur lesquels doit s'adapter la conduite des pays et du système économique international pour surmonter, avec comme horizon 2015, les injustices dont souffrent l'humanité.

3.- La réalisation d'actes solidaires systématiques envers les pays les plus démunis et que s'établisse un ordre logique et humain de priorités en politique économique, avec des projets intelligents qui créent richesse et emploi dans les pays affectés, facilitant un développement soutenable et un progrès qui les aide à consolider un réseau sanitaire, économique et social stable qui rende possible le retour à une situation de départ égalitaire.

4.- Que les mesures nécessaires soient prises afin que les pays riches destinent une part de leurs budgets à la création de richesse et d'entreprises et de sources de travail dans les pays affectés ; ainsi que l'adoption d'un accord international qui devrait se souscrire à la ONU et d'application obligatoire de la part des pays développés.

5.- l'implantation d'un code éthique qui contrôle la stratégie des entreprises multinationales, ainsi que l'élimination des paradis fiscaux et l'application de la taxe Tobin, ou une autre de semblable quand aux transactions commerciales internationales qui permette de créer un fonds de solidarité géré par les Nations Unies.

6.- Nous n'accepterons pas de simples déclarations de principes qui ne se traduisent en politiques concrètes. En définitive, NOUS FAISONS APPEL au sens de la générosité et de l'humanité de tous et fondamentalement de la classe politique internationale, économiquement puissante.

Depuis la Terre qui espère et croit fermement en la Solidarité qui puisse construire un monde meilleur et plus juste, le 30 janvier 2009.


MANIFESTO ON BEHALF OF SOLIDARITY.

WHO WE ARE:

We, the endorsers of this Manifesto, are citizens on total use of our civil rights and holders of popular sovereignty, from where State Powers are emanated.

We, the signers, aware of the situation of poverty, hunger and illness in which great part of the human population lives despite being in a historical moment, as the current one, where sufficient political, economical and scientific means are available so as to solve these problems, address to all world citizens.

This public declaration is a universal calling which heads for the whole humanity, to each human being that inhabits this planet, for them to become aware for the terrible situation that millions of people have to face and, somehow, to encourage them to act accordingly, to bring to an end this unsustainable situation. This is why the original version in Spanish will be translated to different languages, since our intention is that the public opinion´s voice is heard in those places where political and economical decisions are adopted.

WHOM DO WE ADDRESS TO?:
We address to all the politicians who rule our countries; as well as to the highest heads of International Organizations, such as The United Nations, and to presidents and governments of the richest and most powerful countries of the world.

WE DECLARE:
1.- That this text has its origin in the certain fact of the extreme situation of the needs and hunger a big part of the world’s population suffers and in the current unequal and unfair distribution of the properties existing in the earth. We understand that the equanimity and the harmony in our planet must exist based in the acknowledgment of the equal, inalienable and intrinsic dignity of all the members of the human family, that is why it is unacceptable that a big part of the world’s population has to face such a precarious reality with this level of injustice, inequality, hunger, poverty and malnutrition.

2.- Since all human beings are born to be free, we believe that this situation is particularly evil and unethical. We also plead that all citizens in the world must have these rights in the same moment they are brought to life and not as a future promise to be reached depending of the political, social or economical reality of their homeland.

3.- We defend what is utterly unfair, immoral and a humanitarian punishable crime before the international courts and the History that right in the 21st century there still exist human beings starving in this World and dying because of that. It is an aggravating circumstance that, existing enough international laws and technical, economical and scientific means to correct the aforementioned situation, those who have the power in the world do not carry out the necessary actions to solve what future generations will only describe as a real genocide in which they all will be guilty for having the means to solve the problem, but not using them.

4.-We consider this unfair situation to be against the Natural Law, the Human Rights and the procedure of the most elementary ethical principles, and we understand that the moment has come in which the voice of the public opinion demands from their leaders the end of such state of affairs.

5.- That this is neither a utopian nor a political manifesto, and it does not expect the founding of a new political or socio-economic world order, nor any damage to the business, sanitary or social network of the First World, but the most elementary justice with the underprivileged.

BECAUSE OF ALL THE FACTS AFOREMENTIONED, WE DEMAND OF OUR LEADERS:
1. To adopt immediate and urging measures to alleviate such a situation of hunger, illness and malnutrition in the Third World. We think that such measures do not represent any utopia as they are perfectly feasible and possible.

2. To maintain the promise of fulfilling the Millenium Objetives which were established by the UN in the year 2000. These Objectives define the principles that the countries and the international economical system must follow in order to overcome the unfair situations humanity suffers towards the year 2015 (as it was agreed).

3. To perform systematically acts of solidarity towards the countries in an unfavourable position and to establish a logical and human order of priorities in the economical policy, including intelligent projects that create wealth and jobs in the aforementioned countries, offering sustainable development and progress to help them to consolidate a permanent social, economical and health service network that makes it possible for them to start from an equal position.

4. To take the necessary steps so that the richest countries allocate part of their national budgets to create wealth, companies and work sources in the aforementioned countries, as well as to adopt an international agreement, which should be compulsory for the developed countries and signed in the UN.

5. To implement an ethical code that regulates the multinational companies strategy, as well as the elimination of the tax havens and the application of the Tobin Tax —or a similar one— to the international commercial transactions, that will allow to create a solidarity fund managed by the UN.

6. We will not accept simple declarations of principles that are not transformed into specific policies. In other words, we appeal to everybody’s sense of generosity and humanity, especially from the ones who belong to the international ruling class that have the economical power.

From the Earth that waits and believes firmly in the Solidarity that can build a better and fairer world, 30th January 2009.


ENLACES PARA OTRAS LENGUAS:



El Arbol del Guananí

jueves, 22 de enero de 2009


En los anales de la historia se puede encontrar una leyenda de un hecho que ocurrió en un lugar muy lejano, quizás incluso en otro mundo, y en otro tiempo también muy, pero que muy, remoto. Nadie puede asegurar que se trate sólo de un relato de ficción o, por el contrario, de unos hechos que aconteciesen en la realidad, pero se me antoja que eso es algo que carece de toda importancia, si no juzguen por ustedes mismos.

Por aquellos tiempos, toda la humanidad estaba constituida por dos familias que vivían relativamente cerca la una de la otra, aunque no lo suficiente como para evitar el que cada una tuviese hábitos de vida diferentes. Por ejemplo, mientras una de ellas se dedicaba casi exclusivamente al pastoreo y la caza para subsistir, la otra ocupaba su tiempo en las labores de la tierra y la recolección de alimentos silvestres.
Sus distintas ocupaciones no impedían que ambas se mostrasen amistosas. Es más, mantenían una relación muy cordial y se intercambiaban sus bienes constantemente y sin ningún compromiso. Los pastores solían ofrecer algo de carne a sus vecinos, mientras que éstos les correspondían con frutas y hortalizas que cultivaban. Siempre había sido así, y no había ningún motivo por el que esta situación tuviese que cambiar.
No hasta aquel aciago día que transformó la historia de esta pequeña humanidad para siempre.
Varías lunas habían recorrido ya el cielo estrellado desde la última vez que tuvieron un encuentro, así que el patriarca de los agricultores decidió hacerle una visita a su amigo y vecino pensando que aprovecharía también la ocasión para alguno de sus intercambios. Pero conforme se acercaba a su destino, su sorpresa fue en aumento. Por todo el camino de entrada aparecían una serie de imágenes echas en madera o barro, todas muy parecidas, que representaban una especie de tronco de árbol o algo así, aumentando su número a medida que se acercaba al hogar. Por las paredes de la vivienda aparecía también esta misma imagen pero pintada de diversos colores y tamaños y justo a unos metros de la entrada principal se encontraba la mayor de todas, una gran talla de varios metros de alto y de un grosor desproporcionado fabricada con retazos de madera apuntalados y también coloreada de forma extraña.
Cuando los dos hombres se dieron al encuentro, esta es la conversación que se registró:

–¡Amigo Mel! –saludó el agricultor efusivamente–. ¿Pero qué es todo esto que te traes entre manos, algún tipo de reclamo nuevo para tus bestias?
–No digas bobadas Roy –contestó Mel, el pastor–. Y muestra un respeto, haz el favor. Estás ante el Gran Árbol del Guananí.
–¿Cómo dices, el gran árbol de qué? –preguntó de nuevo Roy con una gran sonrisa en el rostro pensando que su vecino le tomaba el pelo.
–No te hagas el tonto, ¿quieres? He dicho el Gran Árbol del Guananí. –en esta ocasión Mel se mostró más serio y tajante en su aseveración.
–Perdón, perdón, no quise ofender, pero es que no entiendo nada. ¿Qué es eso del árbol del guananí? Es la primera vez que lo escucho en mi vida.
–Lógico, ya que sólo a mí me ha sido revelada su existencia –respondió Mel con aires de superioridad–. Pero no te preocupes, eres una persona afortunada por ser mi amigo. Yo te lo contaré todo al igual que hice con el resto de mi familia.
–¿Qué tienes que contarme? –le interrogó Roy muy intrigado.
–Presta atención porque esto que vas a oír es sumamente importante para nuestra futura existencia, amigo. Esta imagen representa al Gran Árbol del Guananí, un árbol de inmensas proporciones que se encuentra al otro lado de las montañas, allá donde ningún ser humano ha sido capaz de llegar. Es único en el mundo y, a pesar de la distancia que nos separa, tiene la capacidad de poder resolver todos nuestros problemas con la caprichosa y tiránica naturaleza que tantos quebraderos de cabeza nos produce, ya lo sabes.
–Un momento, un momento –interrumpió el agricultor algo desconcertado–. No entiendo nada. En primer lugar, ¿cómo es posible que conozcas tú la existencia de ese árbol milagroso si habita en un lugar donde nadie ha llegado? Y en segundo lugar, ¿qué es eso de que puede resolver todos nuestros problemas con la madre naturaleza? Nadie está por encima de ella, es imposible.
–¡Ah, hombre de poca fe! Ya sabía yo que te mostrarías reticente. Algo me dice que la envidia por no haber sido tú su descubridor te reconcome.
–¡Pero qué tonterías estás diciendo! Contesta a mis preguntas si puedes –atajó Roy algo malhumorado por el comentario de su vecino.
–Pues claro que lo haré. Es cierto que nunca he estado en el lugar del que procede, pero eso no es necesario; hace muchas jornadas soñé con él. Se mostró ante mí con una claridad reveladora, su belleza y la luz que de Él emanaba no era comparable a nada conocido. Desde ese preciso momento supe que debía consagrar toda mi vida y la de los míos a Él. Y tú deberías hacer lo mismo si quieres salvarte –concluyó el pastor con rotundidad.
–¿Salvarme de qué? Nada de lo que dices tiene sentido. Pero mira, no importa, ya me lo explicarás otro día, es que ahora tengo un poco de prisa, mi familia necesita algo de carne, como sabrás, y aquí te traigo estas verduras y algo de fruta también para tus animales –el agricultor intentó cambiar de tema al comprobar la insistencia de su amigo en algo que carecía de sentido para él.
–No tan rápido vecino. Ya no podré ofrecerte lo que acostumbraba.
–Pero ¿por qué? –quiso saber Roy sorprendido.
–Es obvio, ¿no? Para que el Árbol del Guananí pueda protegernos de todos los elementos maléficos, hay que cuidarlo, igual que a cualquier otra criatura. Necesita alimentos, agua, compañía. Necesita saber que sus protegidos están aquí respetándolo y adorándolo. Es lógico, tú también lo harías. Parte de lo que te daba a ti tengo ahora que ofrecérselo a Él para que siga cuidando de nosotros. Todos los nuestros se deben ahora a su culto y manutención, no creo que tengamos mucho tiempo para nada más, lo siento.
–¡Pero sí es sólo un trozo de madera! Cómo puedes...
–¡Alto ahí blasfemo! –interrumpió visiblemente enfadado Mel–. No permito que hables así del Él; arrepiéntete de lo que has dicho o todas las calamidades del mundo caerán sobre ti.
–Creo que te has vuelto loco, no puedo creer que toda tu gente piense como tú –exclamó Roy desesperado.
–Pues claro que todos piensan como yo, ¿qué insinúas, que no me respetan? Yo sólo quiero proteger a mi familia, al igual que tú, y haré todo lo que esté en mi mano. Ellos lo saben, por eso creen lo que les digo y se muestran temerosos del poder del Gran Árbol, como deberías de hacer tú y los tuyos. Y por eso mismo no puedo consentir que una presencia turbadora ande por aquí, entre mis hijos. Así que si te niegas a doblegarte a la fuerza de nuestro Gran Protector Árbol del Guananí será mejor que te vayas y no vuelvas, o tendré que tomar represalias contra ti –sentenció Mel.
–Si eso es lo que quieres, así será. Pero procura no acercarte tú tampoco a mis tierras, porque allí ningún estúpido árbol podrá salvarte de mi furia. Hasta nunca, vecino –terminó diciendo Roy al tiempo que se daba media vuelta y volvía por donde había venido.

Y así fue como estas dos familias jamás volvieron a dirigirse la palabra amistosamente. Obviamente sí que volvieron a verse en infinidad de ocasiones, ya que ambos necesitaban algunos de los bienes que el otro disfrutaba, pero sus encuentros siempre fueron furtivos, terminando en violentas confrontaciones y batallas interminables donde las dos familias terminaban perdiendo algo importante a cambio de conseguir algo menos importante.
Al menos eso es lo que cuenta la historia. Como ya he dicho, si ocurrió en realidad o no, es algo que todos desconocen. Aunque si está escrito por algo será, y si no lo estaba, ahora sí que lo está. ¿Quién sabe? puede que incluso me lo esté inventando todo, pero.... ¿qué importancia podría tener?


Para ti

domingo, 18 de enero de 2009

Cuando entras en el infierno de las noches eternas,
y el frío se instala para siempre en tu alma.
Cuando intentas detener el tiempo,

que imparable te roba la esperanza.
Cuando el sol ya no da nada.
Cuando la luz se apaga.
Qué triste llega a ser el desconsuelo,
y qué vacía la mirada.
Para ti, padre,
que te empeñas en parar el viento que te apaga la llama.




Mi buen amigo y hermano Caselo me invita a participar para obtener el libro "El Fuego" de Katherine Neville. La idea viene de Araque-Mezclado no agitado- quien promete regalar uno autografiado por la escritora el 14 de Febrero.
Yo elijo a mis siguientes cómplices: Jose María (Rincón de la imagianción), Silvia (Reikijai) y Cornelivs (Diario de Cornelivs).
El siguiente paso es que cada uno de mis seleccionados deje un mensaje en el blog de Araque, publiquen este meme en sus espacios y escojan a tres de sus cómplices.


Al fin libre

domingo, 11 de enero de 2009

Al fin dejaron de tronar los obuses a la puerta de mi casa,
en la calle donde juego y en la escuela en la que aprendo.

Al fin mis rodillas se ven libres del duro asfalto que las daña,
cuando el hambre las empuja tras ese pan que cae al suelo.

Al fin vuelvo a ver a mis padres, hermanos y amigos,
después de tanta soledad, vuelvo a ser bien recibido.

Al fin el miedo ya se fue, y con él el desconsuelo,
no más lágrimas vertidas, no más gritos nunca oídos.

Al fin el cielo amanece limpio, sin humo y sin ruido,
aunque ya no necesito el sol, porque ahora todo es mío.

Al fin la sonrisa vuelve a surgir en mi rostro compungido,
hundida en un charco de sangre quedó la tristeza y el olvido.

Al fin dejo de ser víctima o verdugo, para convertirme en ángel divino,
allá quedaron los jueces, que ellos decidan su sino.

Al fin puedo entender palabras como justicia o esperanza,
muchos las usan, ¡cuántas veces las habré oído!

Y a esa bala maldita que me arrebató el futuro
le debo mi libertad, mi dicha... y mi agrio destino.



Sabiduría para la Paz

jueves, 8 de enero de 2009


¡Casi nada, la paz mundial! Aquí me he colado, pensarán ustedes. Pero no me juzguen severamente antes de oír (o leer) lo que tengo que decir al respecto. ¿Por qué incluyo este capítulo arriesgándome a parecer presuntuoso y exagerado? Cuando se le pide un deseo a alguien de forma general, casi todo el mundo pensamos en lo mismo: la paz mundial. Por supuesto que todos creemos que esto es algo descabellado e imposible (yo incluido), pero sin embargo no nos impide que sigamos deseándolo fervientemente. Por eso precisamente me gustaría hablar sobre ello; ya que es algo que a todo el mundo nos interesa y porque la única forma de acercarnos a ese deseo es a través de la sabiduría.
¿Por qué solemos ver la paz mundial como algo lejano e imposible? Muy sencillo, porque casi todo el mundo cree que es algo que sólo compete a los gobiernos, organismos oficiales, ejércitos y demás organizaciones que trabajan exclusivamente para este fin. Ese es el error que todos cometemos y por el cual es tan difícil de lograr la tan ansiada paz.

Para que haya paz en el mundo,
es necesario que las naciones vivan en paz.
Para que haya paz entre las naciones,
las ciudades no deben levantarse una contra otra.
Para que haya paz en las ciudades,
los vecinos deben entenderse.
Para que haya paz entre los vecinos,
hace falta que reine la armonía en el hogar.
Para que haya paz en casa,
hay que encontrarla en el corazón de cada uno
.”

Esta es una de mis citas favoritas, pertenece al creador del taoísmo chino Lao Tse. Resume perfectamente la idea que trato de transmitir. Si realmente se desea la paz, primero hay que buscarla en nuestro interior y en nuestro entorno. Ustedes pensarán que muy poco pueden hacer para evitar que se peleen israelitas y palestinos, por ejemplo, y tienen razón, eso les pilla lejos. Pero piensen que lo que ahora está ocurriendo allí y en otros muchos países, cualquier día puede ocurrir aquí, en el nuestro, como de hecho ya ha pasado en otros tiempos, y la única forma de evitarlo está en cada uno de nosotros. Recuerden las palabras de John Lennon: “¿Qué ocurriría si estallase una guerra y nadie va?”, o algo parecido.
Además, una guerra no tiene porqué ser sólo a base de bombas, tanques, soldados y aviones; la proliferación de la violencia callejera, la falta de seguridad en las ciudades, el fanatismo religioso y político, el aumento de los accidentes de tráfico, el vandalismo en los acontecimientos deportivos, el racismo y la xenofobia, etcétera. En definitiva, cualquier acto que viole la armonía entre ciudadanos se podría considerar como un acto de guerra, ya que éstos provocan miles de muertes y daños, tanto físicos como materiales, todos los años en cualquier país, independientemente del grado de desarrollo de éste.
Y no me podrán decir que no está en sus manos el evitar muchas de estas acciones que acabo de mencionar. El pacifista indio Prem Rawat lo define de la siguiente forma:
No es el mundo lo que hay que arreglar, sino las personas. En el momento en que cada ser humano esté en paz interiormente, habrá paz en el mundo.
La paz, la alegría y la auténtica felicidad no existen para que pensemos sobre ellas, sino para que las sintamos. Creemos que necesitamos una explicación de lo que es la paz, pero la paz no se puede explicar; sólo se puede sentir.
Las sociedades no tienen paz. Las sociedades no existen, como tampoco existen los gobiernos; sólo existe la persona. La paz es algo sencillo, algo que debe sentir cada individuo. Cuando olvidamos el significado de estar en paz y nos limitamos a aferrarnos a las fórmulas para lograrla, surgen los problemas.
La paz y la felicidad son inherente a nosotros mismos y, cuanto más intentamos provocarlas, más nos alejamos de ellas
.”
Todo esto pueden parecer palabras muy bonitas pero a la hora de la verdad ustedes se preguntarán ¿y qué puedo hacer yo como individuo para que en el mundo se viva mejor? Es fácil, nadie les pide que hagan nada del otro mundo, simplemente que actúen de forma correcta en todo momento: ¿Han intentado hablar con el vecino cuando éste pone la radio muy fuerte en vez de contraatacar subiendo el volumen de la televisión?; puede que se lleven una sorpresa muy reconfortante. Les invito también a probar la sensación tan agradable que se experimenta cuando nos subimos en nuestro automóvil y nos proponemos respetar todas las señales de tráfico, sin importarnos lo que piensen los demás conductores, sin ponernos nerviosos cuando nos encontramos en medio de un atasco, el cual, seguramente, no habrá sido provocado por nadie en particular deliberadamente, y que tampoco podremos solucionar tocando el claxon o insultando a los conductores que nos preceden. Les animo a que se pongan en el lugar de la otra persona antes de criticarla, insultarla o hablar sobre ella sin que esté presente. Prueben también a pensar que su jefe sólo hace su trabajo cuando les llama la atención y que, si ustedes hicieran el suyo correctamente, seguramente no tendrían por qué enfrentarse. Conciénciense en que las palabras de por sí no tienen por qué hacer daño si uno no quiere. Intenten darle una limosna al anciano indigente que se encuentran todos los días cuando van al trabajo; a ustedes no les costará nada y verán lo contento que se pone él. Antes de decir una mentira, piensen en las consecuencias que podría acarrearles a ustedes o a otra persona.
Son sólo algunos ejemplos, seguro que a ustedes se les ocurrirán muchos más, de situaciones en las que nos vemos envueltos todos los días y que pueden romper la armonía y la paz en cualquier momento; tengan en cuenta también que dos no discuten si uno no quiere.
En la mayoría de las ocasiones, para que las cosas funcionen mejor, evitándose muchos problemas, no es necesario ser amables, ni educados, ni solidarios, ni siquiera «buena gente», sólo basta con algo muy sencillo: cumplir las leyes establecidas. Tan fácil y tan difícil al mismo tiempo. Evidentemente, con educación, solidaridad y empatía todo iría mucho mejor, es más, no serían necesarias ni las leyes, pero claro, esto si que es una utopía. Como decía Aristóteles: “Cuando los hombre se aman unos a otros, no es necesaria la justicia. No hay nada más justo en el mundo que la justicia que se inspira en la benevolencia y en la afección”.
Lo cierto es que en esta sociedad lo que prevalece es todo lo contrario: incumplir la mayoría de leyes posibles. Nadie va por ahí presumiendo de haber hecho un viaje en coche de mil kilómetros sin sobrepasar en ningún momento los límites de velocidad, sin embargo, de lo contrario estoy seguro de que todos conoceremos algún caso; y aunque nosotros no lo hagamos directamente, nos convertimos en cómplices cuando le reímos la gracia a quien sí lo hace en vez de reprenderle.
Si lo prefieren pueden pensar que el actuar correctamente es una acción puramente egoísta, ya que los primeros beneficiados vamos a ser nosotros mismos. No hay mayor felicidad que vivir entre gentes felices. Ya nos lo decía también Aristóteles:
Los que obran bien son los únicos que pueden aspirar en la vida a la gloria y a la felicidad. Si los placeres del vulgo son tan diferentes y tan opuestos entre sí es porque no son, por su naturaleza, verdaderos placeres. Las almas cultas, que aman lo bello, sólo gustan de los placeres que por su naturaleza son placeres verdaderos, y lo son tales todas las acciones conformes a la virtud, que agradan a estos corazones bien nacidos, y les agradan únicamente por sí mismas. El que no encuentra placer en las acciones virtuosas no es verdaderamente virtuoso.”
O también:
Si todos los hombre luchasen únicamente por la virtud y dirigieran siempre sus esfuerzos a practicarla, la comunidad entera vería en conjunto todas sus necesidades satisfechas; y cada individuo en particular poseería el mayor de los bienes, puesto que la virtud es el más precioso de todos. Se llegaría a deducir esta doble consecuencia: de una parte, que el hombre de bien debe ser egoísta, porque haciendo el bien resultará a la vez un gran provecho personal y servirá al mismo tiempo a los demás; y de otra, que el hombre malo no es egoísta, porque sólo conseguirá perjudicarse a sí y dañar al prójimo, siguiendo sus malas pasiones. Toda inteligencia escoge siempre lo que es mejor para ella, y el hombre de bien sólo obedece a la inteligencia y a la razón.”
Después de esto podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que es de persona inteligente el actuar correctamente en todo momento, buscando, no sólo el bien de los demás, sino también, y sobretodo, el suyo propio. Piensen en esto a la hora de hacer la declaración de Hacienda, cuando conducen su vehículo, en el trabajo, cuando discuten con su pareja o amigos, a la hora de hablarles a sus hijos, cuando salen a la calle y se enfrentan con los desconocidos y, en general, en todos los momentos de sus vidas.
Otra cosa importante a tener en cuenta es que el Bien y el Mal se encuentran presentes en cada uno de nosotros en todo momento. Cualquiera de nosotros podría convertirse en determinadas circunstancias en el peor de los demonios, o bien, en todo lo contrario, sin que podamos hacer nada, o casi nada, por evitarlo. Esta idea la transmite muy bien el autor Paulo Coelho en su libro El demonio y la señorita Prym. En él, el santo le hace comprender al bandido que ambos son prácticamente iguales; los dos tienen los mismos deseos, sienten placer por las mismas cosas, también comparten sentimientos de odio y desprecio hacia lo mismo, disfrutan de igual manera, etc. Sólo les diferencia un detalle: el santo es capaz de controlar todos estos sentimientos. Precisamente, esa pequeña diferencia, es la que puede salvarnos en algún momento determinado de nuestras vidas de caer en las garras del demonio que todos llevamos dentro. También la sabiduría nos ayudará a reforzar este autocontrol que todos necesitamos para poder vivir en paz en todo momento, a pesar de las adversidades que, sin duda, surgirán cuando menos esperemos, haciendo peligrar esa tranquilidad y estabilidad a que estamos habituados.

No estoy muy seguro de haberles convencido pero les puedo asegurar que a mi no me cabe ninguna duda con respecto a que la sabiduría puede ayudarnos a conseguir la paz en el mundo.

El Renacer de la Humanidad

lunes, 5 de enero de 2009

"Año 2099; la población mundial alcanza ya los catorce mil millones de habitantes.
Debido al inminente agotamiento del petróleo y del gas natural sobre el año 2040, la Confederación Mundial de la Energía logró que se aprobara en ese mismo año la prospección, hasta entonces prohibida, de las regiones de Alaska y Siberia, consideradas hasta ese momento reservas naturales de la biosfera, las cuales había que proteger a toda costa, ya que, junto con lo poco que quedaba de la selva del Amazonas, constituían las únicas grandes zonas del planeta donde aún se podía ver fauna autóctona salvaje y libre del peligro que siempre supone la cercanía del ser humano. Los yacimientos fueron muy numerosos y cuantiosos asegurándose de nuevo el abastecimiento mundial durante al menos otros ciento cincuenta años.
Sólo se necesitaron veinte para acabar con el hábitat antes mencionado y, por tanto, con las especies que lo habitaban, a pesar de todos los esfuerzos que se hicieron por evitarlo. Como siempre, todo era cuestión de prioridades.
Al mismo tiempo, se había permitido que una sola empresa se encargase de la explotación de estos nuevos yacimientos, consiguiendo así el monopolio total sobre la energía mundial una vez que se agotaron el resto de yacimientos repartidos por el resto del mundo. Los enormes intereses económicos que suponían dicha explotación, en manos de las más poderosas naciones del mundo, provocaron la caída en el desarrollo de las energías limpias alternativas, como la solar, la eólica o la obtenida del hidrógeno, precipitando de esta forma la destrucción del, ya por sí, maltrecho medioambiente.
En el presente, el setenta por ciento de la población mundial se concentra en los países desarrollados de Norteamérica, norte de Europa y Asia, por dos razones fundamentales:
La primera, debido al abandono paulatino por parte de los países desarrollados al tercer mundo, que se ha traducido en la desaparición total de gran parte de la población de África, Sudamérica y parte de Asia, debido a las hambrunas, epidemias y a las guerras entre pueblos por conseguir los, cada vez más escasos, recursos, como son el agua y las tierras cultivables. Los más afortunados han conseguido emigrar al norte, y muchos de ellos aún se dejan la vida en el intento.
En segundo lugar, debido al incremento de la temperatura, producido sobre todo por el continuo aumento de los gases de efecto invernadero vertidos a la atmósfera, y que han provocado la desertización de gran parte del planeta; la mitad de África, el sur de Europa y Asia, casi toda Oceanía y parte de Sudamérica se han convertido en regiones inhóspitas y tórridas donde sólo unos pocos son capaces de sobrevivir durante parte del año.
Por otro lado, la deforestación paulatina del planeta a raíz de la constante búsqueda de tierras cultivables y de materia prima, también contribuyó a la precipitación del desastre climático; del bosque amazónico sólo queda un diez por ciento de lo que había hace cien años. Al igual que el aumento de la masa oceánica provocado por el masivo deshielo de los polos, invadiendo casi la totalidad de islas menores y penínsulas situadas en los límites de los bloques continentales con los océanos. Hasta hace sólo unos sesenta años, las zonas costeras eran las más pobladas del planeta; su rápida desaparición en apenas quince años, ocasionó una masiva migración hacia el centro, desarrollándose de esta forma las grandes metrópolis de la actualidad
."

Así comienza el prólogo del primer libro que escribí hace ya algunos años, cuando me dio por esto de las letras. Ahora me decido a publicarlo en un nuevo blog que enlazo en la columna derecha de éste, bajo el enlace de mi otro libro El Mesías, para todo aquel que quiera leerlo libremente.
En él se describe la caída de la raza humana tras un colapso energético, pero como no siempre está todo perdido.... un nuevo Renacer verá la luz.
Se agradecerán las críticas y comentarios, teniendo en cuenta que es lo primero en serio que escribí en mi vida.

Se acordaron de mí: